El kung fu musulmán o el boxeo de los guardaespaldas

 

(Publicado originalmente en el número de septiembre de 1999 de Inside Kung Fu.)

 

China es un plato condimentado por muchas culturas. Hay más de 50 minorías entre los chinos, además de los propios han. Un número significativo, más de cinco millones, son musulmanes, conocidos en chino como el pueblo "Hui". En el siglo X, un gran número de persas y árabes se adentraron en China a través de las rutas comerciales musulmanas. Muchos se asentaron y dispersaron por el país; algunos vivían entre la población general, otros se pegaban a comunidades concentradas de creyentes.

 Conocida por su dureza, valentía y elevado espíritu, la población musulmana de China no ha sido pasiva en su crecimiento. A menudo explotados y reprimidos, mantuvieron una obstinada confianza en sus creencias y habilidades de lucha. Pero las represalias llegaron a menudo. En la dinastía Ch'ing (1644-1910), por ejemplo, tres hui caminando juntos con armas podían ser castigados. Si se les sorprendía cometiendo un delito, podían incluso marcarles la cara con la palabra Hui Zei (rebelde musulmán). Tal era el trato discriminatorio que recibían los musulmanes en todo el imperio. Por otro lado, en el siglo XIII, los generales musulmanes se unieron bajo una nueva bandera y ayudaron a establecer la dinastía Ming, un punto culminante de la historia china. Sin cesar, los artistas marciales musulmanes adoptaron y perfeccionaron las artes autóctonas de China. Desarrollaron una serie de puños que aún hoy se practican con honor. Pero en la base había un ejercicio particular conocido como…

 La pierna de resorte musulmana

 

 

Si hay un conjunto universalmente reconocido para el estilo musulmán es la "pierna elástica" o Tan Tui. A primera vista, el Tan Tui parece poco impresionante. Los movimientos son repetitivos, estirados, casi mecánicos y se realizan hacia arriba y hacia atrás como en una pista; cada segmento se denomina "camino". El estilo original se subdividía en diez de estos caminos. Más tarde, se introdujo una versión sureña que dividía algunas de las carreteras más duras en bocados más digeribles y ampliaba el conjunto a 12 carreteras. A día de hoy, si dices que practicas Tan Tui, los entendidos preguntarán inmediatamente "¿10 o 12?". Tan Tui es un conjunto popular adoptado por muchos estilos y cada uno de ellos le da un sabor especial. Por ejemplo, en una rama de la mantis, hay un Tan Tui de 14 vías. Con tal popularidad, Tan Tui se convirtió en uno de los primeros conjuntos universales de kung-fu y, por lo tanto, puede reclamar un papel como precursor de las formas estandarizadas del wushu contemporáneo.

Tan Tui, como hemos dicho, no es un juego llamativo. En su mayoría golpes rectos y patadas, a algunos les parece que posee un aspecto robótico que lo hace parecer más un trabajo que una diversión. Pero el tan Tui es tan profundo que muchos boxeadores a lo largo de la historia se han especializado en su técnica. Por ejemplo, los puñetazos abiertos del Tan Tui, conocidos como puñetazos yugo, están diseñados según la práctica médica china para estirar y vigorizar los meridianos del cuerpo. Al mismo tiempo, el puñetazo yugo, con su exagerada extensión de brazos, es un indicador perfecto de la colocación de la cintura del alumno. Los hombros, que normalmente vuelan hacia arriba en el alumno principiante, están tan estirados que caen y se relajan de forma natural. Los mismos beneficios se obtienen con las largas patadas extendidas de este arte. Como su nombre indica, Tan Tui intenta fortalecer los músculos abdominales del practicante forzándole a extenderse mientras patea. La pierna que golpea debe elevarse inmediatamente del suelo con una mínima acción de flexión.

 Al más puro estilo de los puños largos del kung-fu del norte, Tan Tui anima al alumno a encontrar su máxima amplitud de movimiento antes de tensar y acortar. Tan Tui impide la tendencia de los principiantes a flexionar las extremidades y tensar los músculos para crear fuerza. Hace honor a su nombre de puño largo haciendo que el alumno piense de una forma nueva, reprogramando en cierto sentido sus ideas sobre la generación de potencia y la amplitud de movimiento.

 A su debido tiempo, después de que el alumno haya aprendido los diez caminos básicos, debe comenzar el verdadero entrenamiento. Este es un buen ejemplo de métodos de entrenamiento antiguos frente a otros más contemporáneos. Hoy en día, una vez completado el tan Tui, el alumno pasa inmediatamente a otro conjunto de acciones más interesante y diverso. Es una lástima, porque el entrenamiento no ha hecho más que empezar. Por ejemplo, como los diez caminos son independientes, pueden realizarse en cualquier orden. Un buen instructor de Tan Tui hará entonces que el alumno mezcle y combine los caminos hasta que cualquier camino pueda realizarse en cualquier orden a voluntad. A continuación, los caminos se practican de nuevo con pasos arrastrados, cambios de velocidad y pasos en ángulo, rompiendo por completo el aspecto de robot. Esto pone a prueba la creatividad y la capacidad de respuesta de los alumnos. Por último, las acciones de los caminos se mezclan por completo para que el alumno pueda empezar con el nº 1, cambiar al nº 8 y terminar con el nº 5 sin perder el sitio ni la dirección. A partir de una simple serie de movimientos, el alumno está ahora a sólo un pequeño paso de la práctica básica del sparring.

Se dice que Tan Tui fue creado en la dinastía Ming por ChaShagmir (un nombre claramente musulmán incluso en chino). Chamir, como se llamaba, fue uno de los que se dirigieron a la costa para proteger las costas de China de las incursiones de los piratas japoneses. Sin embargo, en este largo viaje enfermó a causa de las duras condiciones climáticas. Le dejaron recuperarse en un pueblo de montaña del condado de GuanXian. Sus anfitriones en esta pequeña aldea fueron tan amables con él que cuando se recuperó ese otoño y les vio practicar su kung-fu después de la cosecha, decidió enseñarles el arte que había ideado. Se lo agradecieron y su arte se extendió por todas partes desde este origen. La gente tomó la primera sílaba de su nombre "Cha" y así nació el estilo conocido como "Cha Chuan" - Puño Cha. Originalmente, su base, el conjunto Tan Tui, se componía de 28 rutinas, una por cada letra del alfabeto árabe. Con el tiempo, todo se recopiló en la pierna de los diez resortes del camino, que permanece con nosotros hoy en día.

 Quienes estén familiarizados con la poesía religiosa árabe observarán que muchas palabras raíz en árabe carecen de vocales y pueden reordenarse para crear otros significados y niveles de comprensión. Esta reordenación, también conocida por ciertas sectas cristianas y judías, se consideraba un estudio válido para todos los estudiantes de la Biblia, la Torá y el Corán. Y nótese como curiosidad que éste es precisamente el método de enseñanza del Tan Tui, tomar diez rutas (raíces) y reensamblarlas para formar nuevos significados y combinaciones aún relacionadas con los ejercicios originales.

Hay un viejo dicho en el kung-fu que dice que una forma dominada vale más que cien saboreadas. Pero con demasiada frecuencia la gente lo interpreta como una repetición sin sentido de la forma. Tan Tui es un ejemplo perfecto de lo que significa dominar una forma. En lugar de aprender nuevas formas más llamativas, que al final se reducen a los mismos movimientos en nuevas combinaciones con un poco de "Hollywood", el estudiante tradicional de kung-fu desarrollaba la potencia y la estabilidad con movimientos familiares antes de alterarlos gradualmente para nuevas situaciones. Reinvertía y acumulaba sus conocimientos. Era una forma sabia de ahorrar y practicar.

 Conocido en toda China, el Tan Tui se practica sobre todo en las provincias de Henan, HeBei, Shantung y Sha'anxi. Dado que sus orígenes se remontan al pueblo Hui, existe incluso un proverbio: Desde NanJing el mejor Tan Tui es el del pueblo Hui", que se convierte en el juego de palabras: "Hui (musulmán) Hui (mejor) Tan Tui".

 Cha Chuan

Con el paso del tiempo, el estilo Cha y otros métodos de boxeo musulmanes se conocieron bajo el nombre general de Jiao Men (lucha de sectas). De las muchas formas jiao men, un grupo en particular, los diez sets de Cha Chuan, es famoso. Al igual que los diez conjuntos básicos de Shaolin, estas famosas formas abarcan todo el repertorio del estilo Cha, sin contar las armas. La primera que se enseña suele ser Cha nº 4, una famosa forma de puño largo.

 Cha es un estilo particularmente bello. Como cualquier puño largo del norte, es grande, orgulloso y fluido. Las posturas son más bajas que en la mayoría de los estilos tipo Shaolin, con especial énfasis en los cambios de altura, el giro de la cintura y el control de la cadera. Pero es el énfasis especial del Puño Cha en la sincronización lo que resulta particularmente interesante. La mayoría de los practicantes principiantes de kung-fu sudan la gota gorda para coordinar manos y piernas como una sola unidad. Pero a medida que el estudiante de Cha progresa, esta coordinación simplificada de paso y puñetazo, patada y palma desaparece lentamente. Se sustituye por un sutil ritmo compensado de velocidades entre sí y de las piernas.

 Cha Fist destaca en el ritmo roto, el ritmo compensado y todo tipo de movimientos que parecen establecer un ritmo, violarlo y encajar de nuevo en el ritmo adecuado, convergiendo en el momento justo. "Convergencia" es la palabra clave. Como en todo kung-fu avanzado, el practicante busca que los miembros se desplacen a ritmos diferentes y luego converjan justo en el momento de la culminación.

 Desde este punto de vista, todos los movimientos y posturas de las formas de kung-fu son algo más que posturas bonitas. Cada grupo es en realidad una tarea completamente distinta que requiere una coordinación y convergencia diferentes. El puño Cha mantiene las antiguas y sutiles variaciones en el tiempo, el ritmo y la ejecución que hacen que el kung-fu sea distintivo, no un molde.

 La contribución musulmana

En el escenario de la historia mundial, el mundo musulmán ha sido un actor importante, sobre todo en las relaciones con Oriente. Los seguidores del Islam fueron los primeros en tender puentes entre la medicina china y la occidental, y empezaron a hacerlo hace 1.000 años. La alquimia, que comenzó en China, se transportó directamente a Occidente a través del mundo árabe y arraigó como los inicios de la química moderna.

 El puño musulmán en China también ha hecho valiosas contribuciones. Cuando la recién formada República de China comenzó a crear una versión genérica y contemporánea del Wushu, tomó como base el Jiao Men. El razonamiento era interesante. Los musulmanes, en su conjunto, siempre habían estado aislados dentro de las minorías de China y, por lo tanto, tenían mucho menos tráfico con otros grupos. Por lo tanto, las autoridades pensaron que el puño musulmán debía ser esencialmente más "puro" que muchos otros estilos. Se adoptó como base del puño largo contemporáneo y muchos de los primeros conjuntos de puño largo emitidos por la oficina gubernamental se basaban en el Cha Chuan.

En ciertos estilos ampliamente aceptados, la presencia musulmana también ha sido fuerte. En el Hsing-I, por ejemplo, muchos de los grandes practicantes eran de origen musulmán y es posible que los verdaderos rudimentos del estilo procedan de la cultura musulmana. También en el trabajo con armas, el puño musulmán está bien representado, y Jiao Men cuenta con cinco conjuntos de gancho de tigre y más de diez de sable. Y por último, pero no por ello menos importante, a los musulmanes se les colocaba a menudo en la peligrosa posición de guardaespaldas debido a su relativa falta de afiliación con otros elementos chinos. Aprovechando la ocasión, desarrollaron el bello y poderoso estilo conocido en todo el mundo como Pa Chi Ch'uan (BaJiQuan - Boxeo de los Ocho Extremos). Como declaró el emperador Chien Lung en el siglo XIX: "Para la salud tenemos el Tai Chi, para la protección el Pa Chi".

Tan universalmente reconocido era el Pa Chi como uno de los estilos más sensatos que incluso en nuestra era actual se consideraba sin igual. Un famoso maestro de Pa Chi fue el instructor de los guardaespaldas de Chiang Kai Shek, Mao Tse Tung y Sun Yet Sen. Así es, los hombres que protegían a estos tres enemigos jurados eran todos hermanos de kung-fu.

En los tiempos modernos nos asaltan constantemente con representaciones de la cultura árabe como aparentemente compuesta por fanáticos religiosos y terroristas. El entrenamiento en artes marciales es un buen antídoto contra la ignorancia cultural. A través de él se nos permite replicar las acciones practicadas por personas de diferentes culturas que vivieron a siglos de nosotros. No sólo podemos mejorar nuestra salud y nuestras habilidades, sino ponernos los zapatos de otra persona y recorrer su camino o, en el caso de Tan Tui, diez caminos.